Universidad Nacional Autónoma de México
Facultad de Estudios Superiores Acatlán
Licenciatura en Pedagogía
ENSAYO
Sobre: Identidad Pedagógica
Fundamentos de la pedagogía
Profesora: Adriana Roque del Ángel
Alumna. Hernández Espinoza Diana Elidet
Grupo: 1152
Noviembre, 2011
Ensayo sobre: Identidad Pedagógica
Desde tiempos anteriores se ha mantenido la discusión de que si la pedagogía es una ciencia o una disciplina, incluso hay quienes la consideran un arte, pero sería también muy útil discutir sobre la identidad del pedagogo para así comprender cuál es su tarea y poder ubicarlo, no solo como un docente, sino ver que en otras áreas su intervención es importante y puede ser capaz de desempeñarse en ellas tan bien como lo podría hacer como profesor.
La mayoría de compañeros que entramos a esta carrera, lo hicimos con un fin en común, el de ser profesores, pero ahora al estar a punto de finalizar el primer semestre de la carrera, ha cambiado la perspectiva, al menos la mía, ahora sé que tengo otras opciones y que puedo ejercer mi profesión en muchos lugares y que aunque decida ejercer la docencia, podré tener una visión más general.
La pedagogía es la disciplina que se encarga del estudio del hecho educativo, y por ende el pedagogo será el encargado de llevar a cabo esta labor, pero dentro de la que va a ser su tarea van implícitas ciertas características con las que debe contar para el adecuado ejercicio de su profesión.
La educación es un proceso muy importante en la vida de todo ser humano, ya que influirá en sus decisiones, en sus acciones y en su proyecto de vida, por lo tanto esta tarea tan importante requiere para llevarse a cabo de una responsabilidad y dedicación, fundamentales en quien va a ser el encargado de guiar tal proceso.
A lo largo de el semestre he leído artículos de revistas alrededor del mundo, en éstas se abordan problemáticas en relación con la educación y de cómo estos problemas afectan directamente a las sociedades actuales, pero sin duda lo que llama mi atención de eso es que señalan como el causante de éstos problemas y fracasos educativos a los pedagogos por no comprometerse con su profesión, por no comprender la importancia de su labor y no proponer soluciones adecuadas.
Incluso una profesora nos contó que el pedagogo, en algún país es considerado un ignorante, y es entonces cuando yo digo que no me gusta la manera como tienen considerados a quienes se supone están encargados de la educación, incluso leí alguna vez en internet, “los que no saben son los encargados de diseñar y ejecutar los planes de estudio”.
Creo que a nosotros nueva generación de pedagogos nos toca hacer algo para que esto cambie y se nos dé el lugar que merecemos.
En primer lugar debemos de evaluar cómo somos, nuestras cualidades y aptitudes, así como nuestras actitudes, el primer semestre ya va a concluir y sería bueno reflexionar si en verdad somos aptos para esta carrera, si en verdad tenemos ese compromiso, y lo vamos a cumplir.
El pedagogo debe ser una persona que comprenda la importancia de su labor y la desempeñe con responsabilidad y conciencia de que influirá en la gente, en sus vidas, que lo que siembre ahora será cosechado en un futuro por la sociedad, así su formación no termina nunca, incluso al salir de la escuela debe seguir aprendiendo, investigando, para así poder dar una adecuada respuesta a la problemática que se le presente y evitar fallar, pienso que ésta profesión no admite fallas.
Alguna vez un profesor nos dijo: “los pedagogos siempre critican todo, pero no proponen soluciones efectivas”, así debemos de ser propositivos y para esto, pues debemos ser personas con un vasto bagaje cultural, conocer de todo. Al entrar a la carrera y ver las materias que llevaría, pensé: “¿para que me va a servir llevar economía , política, psicología?”, ahora ya lo comprendo, para poder proponer soluciones y diseñar proyectos para la educación se debe conocer sobre muchas cosas, para poder vislumbrar una solución que cumpla con los requerimientos de la realidad educativa.
Al estar en una carrera humanista, el estudiante de pedagogía debe ser una persona que sepa cómo dirigirse a los demás, para atender las necesidades de la gente, un pedagogo no puede ser una persona prepotente, grosera, altanera y mucho menos intolerante, y en serio que me ha tocado ver gente así aquí mismo, se supone que nuestra educación va dirigida a humanizarnos y humanizar a los otros, pero hay personas que parece que se equivocaron de carrera, no se puede ser así, por eso insisto en la reflexión para así reconocernos o no como futuros pedagogos, encargados de la formación y dirección de los otros.
El pedagogo se debe identificar entre los demás por ser una persona, que al educar, tiene una educación y es coherente con lo que hace, dice, piensa y proyecta. La mayoría de las carreras tiene una proyección social, pero ninguna como la pedagogía, sin duda.
El objeto de estudio de un pedagogo es muy complejo, la educación, y esto puede resultar un poco intimidante, pero mejor pensarlo como un reto, teniendo tanto que hacer y aprender, puede ser quizá abrumante para algunos, pero para otros puede resultar gratificante.
Los nuevos retos educativos exigen una mayor eficacia de la tarea del educador y un mayor compromiso por parte de éste en el cumplimiento de su tarea, la educación cambia rápidamente de ahí el compromiso que debe tener el pedagogo de no dejar de estudiar, de indagar y de aprender cada día
Toda pedagogía se sienta sobre dos basas inexcusables y en función de ellas: una es el sujeto que se educa y el otro el fin que la educación se propone, por lo tanto se exige el conocimiento de cada uno de esos dos factores por parte del planificador y realizador de la educación para la eficacia óptima de la obra.
El conocimiento del sujeto alude a sus características biosicosociales para poder brindarle una educación personalizada, espiritualizadora, cultivadora y sobretodo, tolerante para no exceder nunca sus posibilidades, necesidades y destino natural y racional del sujeto, pero tampoco ponerse a ellas para así favorecer su plenitud y capacidad potencial, asi es como debe ser la tarea del pedagogo y eso solo se puede lograr con un adecuado conocimiento y conciencia de la importancia de la que va a ser nuestra tarea.
Así desde cualquiera de las áreas en las que decidamos incursionar, nuestra responsabilidad será participar como agente de cambio social para el mejoramiento de la calidad de vida de las personas.
A nosotros nos corresponde romper con los estereotipos e ideas equivocadas que se tienen de la carrera y del pedagogo en sí, demostrar que no somos niñeros, ni tampoco ignorantes, sino que al contrario somos gente preparada que puede con el enorme compromiso que tiene enfrente, que somos capaces de sacarlo adelante y dar buenos resultados, pero repito eso está en cada uno de nosotros, los pedagogos del futuro, pero el compromiso empieza hoy desde que somos estudiantes.
Habrá que ver si cuando los resultados cambien y la situación social mejore, así como ahora se culpa al pedagogo del fracaso educativo, se le reconocerá cuando tenga aciertos, y se le señalará de igual manera que ahora, cuando se dice su ejercicio es deficiente.
De la misma manera como nos corresponde un gran compromiso social, creo que a la sociedad también le corresponde un gran compromiso con nosotros, el de darnos nuestro lugar y reconocer nuestro trabajo, pero eso se puede lograr si nosotros alzamos la voz, si les decimos: “aquí estamos y podemos incursionar en muchos campos, podemos ser capacitadores, orientadores, directores, pedagogos sociales, etc”, debemos reclamar nuestro lugar y ocupar esos puestos que nos ofrecen retos, y que han ocupado por mucho tiempo otros profesionistas, debido a que al pedagogo se le relega siempre a la docencia y aún así he escuchado comentarios de quien me dice que por no ser normalista se dificultará el acceso a l ejercicio docente.
La pedagogía es una gran tarea, pero ahora nos corresponde darla a conocer a los demás y ocupar los lugares que nos corresponde. Nos dejaron de tarea asistir a la semana PYME y muchos salimos de ahí decepcionados, debido a que a muchos se nos dijo que ahí no teníamos cabida, ni siquiera en el área de capacitación, se contrata a otra clase de profesionistas para desempeñar esta labor. Y entonces esto me hace pensar que a la tarea ya de por sí difícil y compleja del pedagogo, también le corresponde luchar por su lugar en el ejercicio de su profesión, no se trata de luchar con los otros profesionistas, sino de hacer una tregua y, así como la pedagogía toma aspectos de muchas otras ciencias, pues también el pedagogo trabajar en conjunto con los otros para buscar el bien común, cada uno en lo que le corresponde y para lo que fue preparado, si se puede trabajar en conjunto con los psicólogos, los sociólogos, los normalistas, etc.
El gremio del pedagogo debe unirse para que sean conocidos y reconocidos, para transformar la idea que se tiene de nuestra profesión y definirla para quien no lo tiene claro, y por supuesto en unión deberán velar para que cada pedagogo se comprometa, se responsabilice y se concientice sobre su importante labor, que en un gremio no solo se debería tener en común la misma profesión u oficio, sino también las mismas metas, sueños, ideales e intereses en relación con la profesión y su labor. Así con cada pedagogo comprometido, estoy segura se podrá lograr una transformación social y un mayor reconocimiento de lo que es la importante y compleja labor del pedagogo.
En resumen podemos decir que la labor del pedagogo comienza desde el momento en que se es estudiante, por lo cuál se debe reflexionar sobre los requerimientos de la carrera y lo que es nuestra personalidad, para así identificar si se tienen las características necesarias para un adecuado ejercicio profesional al egresar de la Universidad.
El compromiso es muy grande, debido a la complejidad del objeto de estudio, la educación, un proceso muy importante en la vida de todo sujeto, por lo cuál corresponderá conocer, aprender, investigar, para así cubrir las necesidades educativas actuales y dar una adecuada solución a la problemática que se presente, a nosotros nos corresponde una gran responsabilidad de hacer entender a los otros la importancia de nuestra labor y la desaparición de estereotipos y malos conceptos que se tienen de los pedagogos, eso lo podremos lograr con una unión en un gremio que también vele por el adecuado ejercicio de la profesión, sólo por medio de la unión, el conocimiento y la concientización y conocimiento de nuestra profesión, podremos ocupar los lugares que nos corresponden y que por mucho tiempo han ocupado otros profesionistas, pero también sólo con un ejercicio comprometido y responsable podremos reclamar el reconocimiento de la sociedad para nuestra importante labor.
Eso está en cada uno de nosotros, estudiantes y futuros pedagogos, depende de la actitud que decidamos asumir desde ahora.
Finalmente agradezco la guía de todos mis profesores de primer semestre, ya que ellos se han encargado de darnos los primeros conocimientos necesarios para entender la importancia de nuestra labor, nos han motivado a ser mejores personas, más humanas, mejor preparadas, responsables y concientes del compromiso tan grande que tenemos no sólo como pedagogos, sino también como profesionistas.
Gracias a cada consejo, regaño, experiencia compartida y más nos van proporcionando las herramientas que nos servirán cuando en un futuro no muy lejano nos enfrentemos al campo laboral.
Me siento satisfecha de estar a punto de terminar el primer semestre de ésta carrera, que ahora sé, no cambio por ninguna otra, y aunque aún me falta mucho por aprender y conocer, sé que lo podré hacer sin problema, ya que las bases fueron bien puestas.
Gracias profesores Pablo y Oscar, y profesoras Sandra, Rocío, Ana María y Adriana.
FUENTES DE CONSULTA
Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación. 2005. Libro Blanco. Título de grado en pedagogía y educación social. Madrid: Omán Impresores.
Calzadilla, Ramón. 2004. La pedagogía como ciencia humanista: conocimiento de síntesis, complejidad y pluridisciplinariedad. En Revista de Pedagogía.
Martínez, Ana María del Pilar. Pedagogía, disciplina, profesión y pasión. En Revista Paedagogium, núm. 30. Disponible en:
http://www.paedagogium.com/NumerosAnteriores/treinta/07.html
Martínez, Emiliano. 1975, Enciclopedia técnica de la Educación. Madrid, España. Santillana, S.A.
Rojas, Ileana. 2004. La transición de la pedagogía como campo de conocimiento. Una mirada desde el análisis conceptual de la producción discursiva. En Revista mexicana de investigación educativa, abril-junio IX, México: COMIE.
Tedesco, Juan Carlos. 2011. Los desafíos de la educación básica en el siglo XXI. En Revista Iberoamericana de Educación. Núm. 55. Río de Janeiro, Brasil. Disponible en: http://www.rieoei.org/rie
Yurén, María Teresa. 2000. Formación y puesta a distancia, su dimensión ética. México: Paidos educador.
Facultad de Estudios Superiores Acatlán
Licenciatura en Pedagogía
ENSAYO
Sobre: Identidad Pedagógica
Fundamentos de la pedagogía
Profesora: Adriana Roque del Ángel
Alumna. Hernández Espinoza Diana Elidet
Grupo: 1152
Noviembre, 2011
Ensayo sobre: Identidad Pedagógica
Desde tiempos anteriores se ha mantenido la discusión de que si la pedagogía es una ciencia o una disciplina, incluso hay quienes la consideran un arte, pero sería también muy útil discutir sobre la identidad del pedagogo para así comprender cuál es su tarea y poder ubicarlo, no solo como un docente, sino ver que en otras áreas su intervención es importante y puede ser capaz de desempeñarse en ellas tan bien como lo podría hacer como profesor.
La mayoría de compañeros que entramos a esta carrera, lo hicimos con un fin en común, el de ser profesores, pero ahora al estar a punto de finalizar el primer semestre de la carrera, ha cambiado la perspectiva, al menos la mía, ahora sé que tengo otras opciones y que puedo ejercer mi profesión en muchos lugares y que aunque decida ejercer la docencia, podré tener una visión más general.
La pedagogía es la disciplina que se encarga del estudio del hecho educativo, y por ende el pedagogo será el encargado de llevar a cabo esta labor, pero dentro de la que va a ser su tarea van implícitas ciertas características con las que debe contar para el adecuado ejercicio de su profesión.
La educación es un proceso muy importante en la vida de todo ser humano, ya que influirá en sus decisiones, en sus acciones y en su proyecto de vida, por lo tanto esta tarea tan importante requiere para llevarse a cabo de una responsabilidad y dedicación, fundamentales en quien va a ser el encargado de guiar tal proceso.
A lo largo de el semestre he leído artículos de revistas alrededor del mundo, en éstas se abordan problemáticas en relación con la educación y de cómo estos problemas afectan directamente a las sociedades actuales, pero sin duda lo que llama mi atención de eso es que señalan como el causante de éstos problemas y fracasos educativos a los pedagogos por no comprometerse con su profesión, por no comprender la importancia de su labor y no proponer soluciones adecuadas.
Incluso una profesora nos contó que el pedagogo, en algún país es considerado un ignorante, y es entonces cuando yo digo que no me gusta la manera como tienen considerados a quienes se supone están encargados de la educación, incluso leí alguna vez en internet, “los que no saben son los encargados de diseñar y ejecutar los planes de estudio”.
Creo que a nosotros nueva generación de pedagogos nos toca hacer algo para que esto cambie y se nos dé el lugar que merecemos.
En primer lugar debemos de evaluar cómo somos, nuestras cualidades y aptitudes, así como nuestras actitudes, el primer semestre ya va a concluir y sería bueno reflexionar si en verdad somos aptos para esta carrera, si en verdad tenemos ese compromiso, y lo vamos a cumplir.
El pedagogo debe ser una persona que comprenda la importancia de su labor y la desempeñe con responsabilidad y conciencia de que influirá en la gente, en sus vidas, que lo que siembre ahora será cosechado en un futuro por la sociedad, así su formación no termina nunca, incluso al salir de la escuela debe seguir aprendiendo, investigando, para así poder dar una adecuada respuesta a la problemática que se le presente y evitar fallar, pienso que ésta profesión no admite fallas.
Alguna vez un profesor nos dijo: “los pedagogos siempre critican todo, pero no proponen soluciones efectivas”, así debemos de ser propositivos y para esto, pues debemos ser personas con un vasto bagaje cultural, conocer de todo. Al entrar a la carrera y ver las materias que llevaría, pensé: “¿para que me va a servir llevar economía , política, psicología?”, ahora ya lo comprendo, para poder proponer soluciones y diseñar proyectos para la educación se debe conocer sobre muchas cosas, para poder vislumbrar una solución que cumpla con los requerimientos de la realidad educativa.
Al estar en una carrera humanista, el estudiante de pedagogía debe ser una persona que sepa cómo dirigirse a los demás, para atender las necesidades de la gente, un pedagogo no puede ser una persona prepotente, grosera, altanera y mucho menos intolerante, y en serio que me ha tocado ver gente así aquí mismo, se supone que nuestra educación va dirigida a humanizarnos y humanizar a los otros, pero hay personas que parece que se equivocaron de carrera, no se puede ser así, por eso insisto en la reflexión para así reconocernos o no como futuros pedagogos, encargados de la formación y dirección de los otros.
El pedagogo se debe identificar entre los demás por ser una persona, que al educar, tiene una educación y es coherente con lo que hace, dice, piensa y proyecta. La mayoría de las carreras tiene una proyección social, pero ninguna como la pedagogía, sin duda.
El objeto de estudio de un pedagogo es muy complejo, la educación, y esto puede resultar un poco intimidante, pero mejor pensarlo como un reto, teniendo tanto que hacer y aprender, puede ser quizá abrumante para algunos, pero para otros puede resultar gratificante.
Los nuevos retos educativos exigen una mayor eficacia de la tarea del educador y un mayor compromiso por parte de éste en el cumplimiento de su tarea, la educación cambia rápidamente de ahí el compromiso que debe tener el pedagogo de no dejar de estudiar, de indagar y de aprender cada día
Toda pedagogía se sienta sobre dos basas inexcusables y en función de ellas: una es el sujeto que se educa y el otro el fin que la educación se propone, por lo tanto se exige el conocimiento de cada uno de esos dos factores por parte del planificador y realizador de la educación para la eficacia óptima de la obra.
El conocimiento del sujeto alude a sus características biosicosociales para poder brindarle una educación personalizada, espiritualizadora, cultivadora y sobretodo, tolerante para no exceder nunca sus posibilidades, necesidades y destino natural y racional del sujeto, pero tampoco ponerse a ellas para así favorecer su plenitud y capacidad potencial, asi es como debe ser la tarea del pedagogo y eso solo se puede lograr con un adecuado conocimiento y conciencia de la importancia de la que va a ser nuestra tarea.
Así desde cualquiera de las áreas en las que decidamos incursionar, nuestra responsabilidad será participar como agente de cambio social para el mejoramiento de la calidad de vida de las personas.
A nosotros nos corresponde romper con los estereotipos e ideas equivocadas que se tienen de la carrera y del pedagogo en sí, demostrar que no somos niñeros, ni tampoco ignorantes, sino que al contrario somos gente preparada que puede con el enorme compromiso que tiene enfrente, que somos capaces de sacarlo adelante y dar buenos resultados, pero repito eso está en cada uno de nosotros, los pedagogos del futuro, pero el compromiso empieza hoy desde que somos estudiantes.
Habrá que ver si cuando los resultados cambien y la situación social mejore, así como ahora se culpa al pedagogo del fracaso educativo, se le reconocerá cuando tenga aciertos, y se le señalará de igual manera que ahora, cuando se dice su ejercicio es deficiente.
De la misma manera como nos corresponde un gran compromiso social, creo que a la sociedad también le corresponde un gran compromiso con nosotros, el de darnos nuestro lugar y reconocer nuestro trabajo, pero eso se puede lograr si nosotros alzamos la voz, si les decimos: “aquí estamos y podemos incursionar en muchos campos, podemos ser capacitadores, orientadores, directores, pedagogos sociales, etc”, debemos reclamar nuestro lugar y ocupar esos puestos que nos ofrecen retos, y que han ocupado por mucho tiempo otros profesionistas, debido a que al pedagogo se le relega siempre a la docencia y aún así he escuchado comentarios de quien me dice que por no ser normalista se dificultará el acceso a l ejercicio docente.
La pedagogía es una gran tarea, pero ahora nos corresponde darla a conocer a los demás y ocupar los lugares que nos corresponde. Nos dejaron de tarea asistir a la semana PYME y muchos salimos de ahí decepcionados, debido a que a muchos se nos dijo que ahí no teníamos cabida, ni siquiera en el área de capacitación, se contrata a otra clase de profesionistas para desempeñar esta labor. Y entonces esto me hace pensar que a la tarea ya de por sí difícil y compleja del pedagogo, también le corresponde luchar por su lugar en el ejercicio de su profesión, no se trata de luchar con los otros profesionistas, sino de hacer una tregua y, así como la pedagogía toma aspectos de muchas otras ciencias, pues también el pedagogo trabajar en conjunto con los otros para buscar el bien común, cada uno en lo que le corresponde y para lo que fue preparado, si se puede trabajar en conjunto con los psicólogos, los sociólogos, los normalistas, etc.
El gremio del pedagogo debe unirse para que sean conocidos y reconocidos, para transformar la idea que se tiene de nuestra profesión y definirla para quien no lo tiene claro, y por supuesto en unión deberán velar para que cada pedagogo se comprometa, se responsabilice y se concientice sobre su importante labor, que en un gremio no solo se debería tener en común la misma profesión u oficio, sino también las mismas metas, sueños, ideales e intereses en relación con la profesión y su labor. Así con cada pedagogo comprometido, estoy segura se podrá lograr una transformación social y un mayor reconocimiento de lo que es la importante y compleja labor del pedagogo.
En resumen podemos decir que la labor del pedagogo comienza desde el momento en que se es estudiante, por lo cuál se debe reflexionar sobre los requerimientos de la carrera y lo que es nuestra personalidad, para así identificar si se tienen las características necesarias para un adecuado ejercicio profesional al egresar de la Universidad.
El compromiso es muy grande, debido a la complejidad del objeto de estudio, la educación, un proceso muy importante en la vida de todo sujeto, por lo cuál corresponderá conocer, aprender, investigar, para así cubrir las necesidades educativas actuales y dar una adecuada solución a la problemática que se presente, a nosotros nos corresponde una gran responsabilidad de hacer entender a los otros la importancia de nuestra labor y la desaparición de estereotipos y malos conceptos que se tienen de los pedagogos, eso lo podremos lograr con una unión en un gremio que también vele por el adecuado ejercicio de la profesión, sólo por medio de la unión, el conocimiento y la concientización y conocimiento de nuestra profesión, podremos ocupar los lugares que nos corresponden y que por mucho tiempo han ocupado otros profesionistas, pero también sólo con un ejercicio comprometido y responsable podremos reclamar el reconocimiento de la sociedad para nuestra importante labor.
Eso está en cada uno de nosotros, estudiantes y futuros pedagogos, depende de la actitud que decidamos asumir desde ahora.
Finalmente agradezco la guía de todos mis profesores de primer semestre, ya que ellos se han encargado de darnos los primeros conocimientos necesarios para entender la importancia de nuestra labor, nos han motivado a ser mejores personas, más humanas, mejor preparadas, responsables y concientes del compromiso tan grande que tenemos no sólo como pedagogos, sino también como profesionistas.
Gracias a cada consejo, regaño, experiencia compartida y más nos van proporcionando las herramientas que nos servirán cuando en un futuro no muy lejano nos enfrentemos al campo laboral.
Me siento satisfecha de estar a punto de terminar el primer semestre de ésta carrera, que ahora sé, no cambio por ninguna otra, y aunque aún me falta mucho por aprender y conocer, sé que lo podré hacer sin problema, ya que las bases fueron bien puestas.
Gracias profesores Pablo y Oscar, y profesoras Sandra, Rocío, Ana María y Adriana.
FUENTES DE CONSULTA
Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación. 2005. Libro Blanco. Título de grado en pedagogía y educación social. Madrid: Omán Impresores.
Calzadilla, Ramón. 2004. La pedagogía como ciencia humanista: conocimiento de síntesis, complejidad y pluridisciplinariedad. En Revista de Pedagogía.
Martínez, Ana María del Pilar. Pedagogía, disciplina, profesión y pasión. En Revista Paedagogium, núm. 30. Disponible en:
http://www.paedagogium.com/NumerosAnteriores/treinta/07.html
Martínez, Emiliano. 1975, Enciclopedia técnica de la Educación. Madrid, España. Santillana, S.A.
Rojas, Ileana. 2004. La transición de la pedagogía como campo de conocimiento. Una mirada desde el análisis conceptual de la producción discursiva. En Revista mexicana de investigación educativa, abril-junio IX, México: COMIE.
Tedesco, Juan Carlos. 2011. Los desafíos de la educación básica en el siglo XXI. En Revista Iberoamericana de Educación. Núm. 55. Río de Janeiro, Brasil. Disponible en: http://www.rieoei.org/rie
Yurén, María Teresa. 2000. Formación y puesta a distancia, su dimensión ética. México: Paidos educador.